Comunidad mundial
Prácticas ciudadanas para una ciudadanía planetaria
Un proyecto | 2 acciones | Un documento pedagógico | Un documento de análisis | Una cartas / Un manifiesto / Una declaración
La complejidad y la amplitud de las interdependencias entre las sociedades humanas se hacen sentir con cada golpe de la actualidad: desde la crisis económica del nivel de un estado al nivel internacional, hasta los centros de guerras regionales, el terrorismo, las migraciones y las nuevas formas de esclavitud y explotación humana… todo demuestra que estamos todos concernidos, intrínsecamente vinculados en una comunidad de destino. ¿Cómo llegar entonces a la toma de conciencia de esta comunidad de hecho y a la emergencia de una ciudadanía planetaria y de una comunidad mundial?
La idea de comunidad está orgánicamente vinculada con la idea de responsabilidad mutua y esto a cada escala y a todas las edades de la humanidad. Hay comunidad cuando cada uno de sus miembros se sabe deudor hacia los otros del impacto de sus acciones.
Por todas partes del mundo, medios sociales y profesionales diversos (pensionistas, ejecutivos de empresas, científicos, periodistas, militares, etc.) reflexionan sobre la cuestión de la responsabilidad, experimentan nuevas prácticas ciudadanas, inventan nuevas formas de diálogo “de sociedad a sociedad”, nuevos espacios donde los ciudadanos se unen en “asambleas”, nuevas formas de intercambio de experiencias y proyectos de acción colectiva. Iniciativas que constituyen de hecho formas de aprendizaje social, donde al reconocer nuestras responsabilidades mutuas, tomamos conciencia de nuestra comunidad de destino y de la necesidad de una ciudadanía planetaria.
¿Qué iniciativas y proyectos de acción ciudadana se pueden formular en que se antepone la ética de una ciudadanía planetaria?
Un proyecto
2 acciones
- Poner la Responsabilidad en el centro de la transición hacia sociedades sustentables
- Taller “Climate Chance”, encuentro de seres excepcionales. Vulnerabilidad / Resiliencia para el clima: mujeres, jóvenes, personas mayores, tercer mundo